El anacardo, asimismo conocido como castañas de cajú o bien marañón, entre otros nombres, es el fruto seco que se consigue del árbol o bien planta Anacardium occidentale.
Debido a su alto contenido de calcio y hierro, es uno de los frutos secos más indicados para los regímenes veganas y vegetarianas.
Es originario de la zona norte de Brasil y de una gran parte de Venezuela. A pesar de ser un fruto propio de esta zona de Sudamérica, en nuestros días no es complicado hallarlo en otra una parte del planeta.
Este comestible se puede consumir crudo o bien torrado. Por norma general se vende como snack salobre, mas en herbolarios y tiendas expertas en frutos secos o bien productos naturales al peso se pueden hallar los anacardos crudos, los que son ideales para la cocina.
En la cocina vegana, los anacardos crudos se usan para crear quesos vegetales o bien bebidas. Uno de los postres estrella de la dieta vegana es el cheesecake de anacardos crudos.
Propiedades de los anacardos
El anacardo es uno de los frutos con mayores propiedades nutricionales que existe. Mas si hay algo que resalta es la cantidad de triptófano que contiene, que ronda en torno a los setenta y dos mg por cada treinta gramos. Prácticamente exactamente la misma cantidad que tiene la clara de huevo, uno de los comestibles con más triptófano.
El triptófano, presente en el anacardo o bien cajú, es un aminoácido esencial vital para la vida humana, el que contribuye a la segregación de serotonina, fundamental para regular el estado anímico, y la segregación de melatonina, esta última fundamental para conciliar el sueño y compensar los estados de sueño/vigilia en la vida rutinaria.
Otras propiedades a resaltar de los anacardos son su contenido de vitaminas. Este fruto contiene múltiples vitaminas del complejo B, como las vitaminas B1, B2, B5 y B6, todas y cada una de vital relevancia y la vitamina liposoluble E, una vitamina con propiedades antioxidantes que ayuda al mantenimiento celular.
El marañón, como llaman en muchas zonas al anacardo, asimismo contiene minerales como cobre, magnesio, selenio, cinc y potasio, mas resaltan sobre todo el calcio, del que contiene treinta y siete mg por cada cien gramos y el hierro, cuyo contenido es uno de los mayores en los frutos secos y otros comestibles, con seis con siete mg por cada cien gramos del comestible.
Beneficios del anacardo
Entre las ventajas del anacardo cabe nombrar que contiene grasas sanas, de las que se favorece el cuerpo para regular las cantidades de colesterol en sangre.
Todo de este modo, es uno de los frutos secos con menor cantidad de grasas, lo que además de esto lo vuelve ideal para los regímenes que procuran compensarse en lo que se refiere a grasas y calorías.
Como afirmábamos, este comestible es ideal para supervisar los trastornos del sueño, por sus cantidades de triptófanos. Por su parte, este aminoácido esencial nos ayuda a prosperar el estado anímico y contrarrestar los bajonazos o bien picos de estrés, merced a este nutriente y el papel del mismo en la segregación de serotonina.
Por si fuera poco, su alto contenido de magnesio y calcio lo vuelven un comestible ideal para fortalecer los huesos. En tanto que estos están compuestos de los dos minerales, y no solo de calcio.
Otro de las ventajas a resaltar entre las propiedades del anacardo es que merced a las cantidades de hierro, podemos evitar la anemia o bien progresar la producción y las cantidades de glóbulos colorados en la sangre.
También en casos de anemia leve, incluir este comestible en la dieta puede ser de mucha ayuda. En los casos menos leves o bien graves es muy posible que no sea suficiente con acrecentar el hierro en la nutrición y se va a deber recurrir a complementos o bien suplementos nutricionales o bien farmacéuticos.
Otro de los componentes químicos del anacardo son los fitoesteroles, los que aparte de favorecer el equilibrio del colesterol, asisten a contrarrestar los efectos de la menopausia en las mujeres adultas.
El anacardo, marañón, cajú o bien como se quiera llamar es uno de los comestibles más esenciales que puedes incluir en tu dieta. ¿Qué estás aguardando?