Es muy recurrente que la multitud asocie la caída de el papel de los árboles frutales con la época perfecto para plantarlos.
Y de esta forma es ―o bien era―, los frutales de hoja caduca como el manzano, el peral, el cerezo y considerablemente más, tienen que plantarse desde el otoño hasta finales del invierno o bien principios de primavera, antes que salgan del reposo invernal y empiecen otra vez a brotar.
Mencionamos «era» porque en este momento se acostumbran vender en macetas con su cepellón y la raíz muy bien cuidada por este. En esas condiciones se tienen la posibilidad de agrandar bastante las datas para plantarlos, ahora que el árbol solo pasa de medrar en una maceta a medrar en exactamente la misma tierra de la maceta mas además en el suelo.
Por consiguiente, un frutal ―o bien algún árbol de hoja caduca― que se consigue con su correspondiente maceta puede plantarse cualquier ocasión del año, porque a lo largo de la época fría va a estar en reposo ―sin actividad ni hojas― por lo cual no padecerá ningún daño.
¿Mas qué sucede con los frutales ―como el limonero― que no pierden el papel? Eso observaremos ahora.
El limonero y el frío
Varios árboles y arbustos que no pierden sus hojas son originarios de sitios cálidos, en los que en ningún instante del año hace bastante frío para que fuera ventajoso desprender las hojas y ingresar en reposo.
O sea lo que le sucede al limonero, y de ahí que no está listo para aguantar temperaturas frías, más si cabe si se saca de un ámbito caluroso como puede ser el de una tienda de jardinería donde generalmente se tienen la posibilidad de adquirir.
Mejor época para plantarlo
En el momento en que se marcha a plantar un limonero en una región cierta, hay que conseguir información en relación al tiempo de exactamente la misma. Solo de esta forma se va a poder tener la seguridad de que todo irá bien.
Tiempos fríos
En zonas donde las heladas empiezan en otoño y se extienden hasta la primavera, va a haber que aguardar a que acaben para plantar el limonero.
La preferible época es, por consiguiente, la segunda mitad de la primavera.
En en el caso de que no se logre aguardar, se puede adaptar de a poco el árbol, sacándolo al exterior gradualmente a fin de que vaya adaptándose al frío. Además, va a haber que taparlo con una manta protectora o bien plantarlo a la vera de una pared radiante.
Tiempos tibios
En estos tiempos tienen la posibilidad de darse ciertas heladas en otoño, bastantes en invierno y alguna ocasional en primavera.
Se puede plantar de todas formas en primavera ―si no se desean correr peligros― o bien a finales del invierno, aclimatándolo primero y brindándole algún género de protección si fuera primordial.
Tiempos cálidos
Si no hay peligro de heladas ―ni de fenómenos desfavorables como huracanes, tifones, olas de calor, etc― el limonero se puede plantar en algún época del año.
